Cupido nos lleva visitando por San Valentín desde hace muchos, muchos años. En realidad, la celebración del día del amor, es una fecha señalada desde tiempos inmemorables y la tradición siempre ha tenido como regalo icónico las flores.

Las flores y el amor no siempre se han entendido como un sentimiento romántico. Gracias a nuestras preciadas flores podemos expresar amor, cariño, amistad y un sinfín de emociones que recorren nuestras venas el 14 de febrero de cada año y muchos más días que no tienen un ángel alado para lanzar flechas de amor.

Según la leyenda, San Valentín data nada más y nada menos que del Imperio Romano. Un sacerdote llamada Valentín decidió desatender las órdenes del emperador y oficiar bodas en secreto. Los ramilletes de las novias fueron los que dieron la voz de alarma a las autoridades, y aquel romántico sacerdote fue arrestado por su desobediencia.

Durante sus días de presidio, un guardia la suplicó que curase a su hija, la cual padecía ceguera. A pesar que aquel sacerdote obró un milagro devolviendo la vista a la joven, el emperador no dudó en ajusticiarlo.

En recuerdo de su hazaña, aquella joven plantó un almendro en su tumba, un gesto que desde entonces ha hecho que la flor del almendro simbolice amor y amistad.

Sin embargo, las rosas rojas son sin lugar a duda las protagonistas de esta peculiar forma del año. ¿Sabéis por qué? En este caso la historia es bastante menos curiosa, sencillamente el significado de la flor ha sido quien la ha coronado como la reina de San Valentín. Su color, pasión y su belleza, admiración, son dos adjetivos que todo enamorado antepone a su pareja.

Si este 14 de febrero quieres decir te quiero a tu pareja o expresar amor por esa persona tan especial, en Decoflor Toledo te prepararemos el ramo perfecto para esta ocasión.

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